martes, noviembre 30, 2004

La música sin instrumento


Las cosas que no puedo nombrar, las que no tienen límite, se llenan de intensidad.

Después del trabajo he ido a casa de unas amigas a ver el último dvd de ani difranco. Y claro, por la tarde he llegado a la facultad con unas ganas tremendas de tocar la guitarra y cantar pero me he encontrado en la pizarra "hacer una composición de 8 compases, 3/4, dos periodos, primer periodo final suspensivo, segundo periodo final conclusivo, tonalidad Mib Mayor, principio anacrúsico, final masculino".

Me he plantado delante del pentagrama con el lápiz y la goma de Milán. Pero el papel no sonaba. Lo he sacudido, lo he volcado, lo he puesto del revés y nada, que no suena. De momento, sin instrumento, no sé hacer música.

Aún así, me he puesto a repartir figuras sobre el pentagrama, un poco con ton pero sin son, queriendo imaginar la melodía y recordando ese gran día que les dije a mis padres "papá, mamá, yo paso del solfeo, yo lo que quiero es un grupo de rock"

Cuando por fín he podido probar qué tal sonaba "eso" que había escrito, me he dado cuenta de que había compuesto una especie de "quinto levanta y tira de la manta" en versión infantil que verdaderamente era para asustarse. Ah, pero eso sí, cumplía todos los requisitos de la pizarra.

Ya, ya sé que toco la guitarra sin saber el nombre de las notas ni de los acordes que yo creo que me invento, pero que más da. Lo mismo me pasa con el piano. Pero las cosas que no sé nombrar, las que no tienen límite, creo que son las que más me gustan.

Me encantaban las clases de literatura del instituto porque mi profesor recitaba poemas de Pedro Salinas y todo aquello era un interrogante.

Por eso hoy, sin saber por qué, olías a pan, como todo mi día de ayer. Cómo puede ser que justo hoy me diera cuenta de eso. ¿Cómo puedes oler a tantas cosas? Te miro y me preguntas sonriendo "¿Qué?" y yo respondo "Nada". Pero "nada" lo contiene todo. Yo lo supe el día que me miré en el espejo del retrovisor y tú estabas allí. Y mirando mi reflejo me preguntaba ¿soy yo?

Y sí, realmente estaba contigo y era yo.

...
Ha sido, ocurrió, es verdad.
Fue un día, fue una fecha
que le marca el tiempo al tiempo.
Fue un lugar que yo veo.
Sus pies pisaban el suelo
este que todos pisamos.
Su traje
se parecía a esos otros
que llevan otras mujeres.
Su reló* destejía calendarios,
sin olvidarse de una hora:
como cuentan los demás.
Y aquello que ella me dijo
fue en un idioma del mundo,
con gramática e historia.
Tan de verdad, que parecía mentira.
...
No.
Tengo que vivirlo dentro,
me lo tengo que soñar.

(De Pedro Salinas, dentro de La Voz a ti debida)

* A Salinas le gustaba escribir así "reloj". Como a Juan Ramón Jimenez le gustaba poner "j" en vez de "g" cuando sonaba como una "j". Eran unos punkis, es verdad.

domingo, noviembre 28, 2004

Pan

Mi amiga tiene la cama más grande del mundo. Aún así solemos encontrarnos. Los perros ladran felices fuera y los coches pasan cerca de la ventana. Nuestro despertar a pie de calle, nuestro despertar.

Dentro, mi amiga siempre susurra "voy a comprar el pan", se levanta y empieza a vestirse. Recoge la ropa que hay en el suelo, "esto es tuyo... y esto es mío..." Y yo digo, "no no, eso es mío" Pero casi siempre me equivoco -es que me gusta su ropa- Ella ha quedado en la playa a las 12 para hacer un vermut y yo me voy a casa con un trozo de pan tierno.

Me he puesto a lavar el coche, que domingo más domingo, y le he pasado hasta la aspiradora porque aún habían restos de pan y de algún desayuno. He borrado del vidrio el corazón y las iniciales que escribí aquel día que llovía , porque me recordaba demasiado a otras cosas.
Mientras, con la verja de casa abierta, la perra pequeña aprovechaba para escaparse -no lo hace nunca, siempre suele escaparse el perro- La he ido a buscar y se había metido en casa de la viuda. He estado charlando un rato con la mujer y me ha enseñado las fotos de la boda de su hijo. "¿ah... pero ya se ha casado?" "Sí, sí claro, tiene 27 años" Vaya, yo tengo 26.
Recuerdo a su hijo de hace cinco años y aquella noche que salimos todos y volvimos en su flamante coche nuevo. Íbamos riéndonos, hablando, hasta que en las curvas de la carretera empezó a acelerar demasiado. Nos callamos como muertos. Nadie se atrevió a abrir la boca hasta que llegamos a nuestra calle, y ya a salvo le dijimos que si estaba loco, que si casi nos matamos. Él nos contestó: me importa todo una mierda desde que mi padre está muerto.


Pan: alimento hecho de harina amasada con agua, generalmente fermentada y cocida al horno. Todo lo que en general sirve para el sustento diario.

sábado, noviembre 27, 2004

es una gran persona

ella nació en mi día preferido para nacer: el 27 de Noviembre. Ella es una gran persona. Además la otra noche estuvo conmigo hasta que se me pasó la borrachera y además le dí la lata y mis excusas eran de niña muy niña.
Además eran excusas.
Colgaremos serpentinas en la casa del balcón con barrotes de regaliz y haremos una fiesta. Espero que venga "E" porque la quiero y empiezo a conocerla después de 9 meses. Hay cosas que requieren su tiempo, como un embarazo.
Pincharemos mp3 y pondremos billy jean, por qué no. Tendré que quedarme a dormir en alguna casa, así seguro que no tengo pesadillas porque no será mi cama.
No me gusta hablar de las fiestas que aún no han sido. Es como imaginar otro sábado con
tigo.

jueves, noviembre 25, 2004

...

El sueño de Paola


mi cama guarda la misma pesadilla desde hace algunos años. Sólo pertenece a mi cama, sólo ocurre en mis camas, nunca en las camas de los demás. La reconozco siempre que aparece. En ella me despierto y quiero moverme pero algo me lo impide. El sueño me pesa. Entonces me asusto porque sé que estoy dentro y no me fio de lo que pueda pasar. Me despierto una y otra vez pero dentro del sueño del sueño del sueño del sueño. Es engañosa. En la de hoy he oído unos anillos rodando por la habitación, unos anillos que eran los tuyos, "¿Qué hacen sus anillos en mi sueño?" -he pensado- y para descubrirlo me he dejado caer , quería atraparlos, era importante... Y al topar con el suelo lo he atravesado. No he visto nada, me he despertado, pero aún estaba dentro porque tus anillos seguían allí. Tengo un pote lleno de monedas de chocolate, sé que te gustarían mucho

Aquells rics

L'altra tarda un BMW s'aturava en doble fila a Passeig de Gràcia. Del cotxe va sortir una mare amb els seus fills, carregada amb una maleta de viatge de color negre i d'aquelles amb rodes que fan tant de soroll. Ens miràvem l'escena assegudes a un banc. Tu seies amb una cama doblegada per sota el cul, i jo seia normal. Jo seia ben normal. Anava passant la gent i ens miràven de reüll si ens feiem un petó o algun gest carinyós. Sobretot, els gestos, que sempre siguin carinyosos. La dona amb fills va entrar a un portal del mateix Passeig de Gràcia i vàrem pensar que deurien tenir molts diners i que segurament marxarien de viatge cada cap de setmana. Vam alçar la vista cap a l'edifici i em vas dir que t'agradava molt aquella finestra. ¿Quina? Aquella. A mi també m'agradava, aleshores jo vaig aprofitar per explicar-te que l'any passat treballava a un lloc que tenia una finestra molt maca i molt gran. Sempre li volia fer una foto. Era una casa antiga, una mansió d'aquelles de la part alta de la ciutat. L'altre dia vaig passar per davant per veure la finestra des de fora i vaig veure que posava que l'havien convertit en una residència d' avis. Sort que em van fer fora abans de la conversió. Jo també vull aquella finestra o alguna semblant, hi posaré per tu el pot que tinc plé de monedes de xocolata. Ja veuràs, t' agradarà molt.

miércoles, noviembre 24, 2004

Adrián

Adrián, el hacedor de vidrio, funde arena, sosa y caliza a 1.500 grados centígrados.
Aquella era su vocación, aunque una vocación no fuera suficiente.
Adrián tenía grandes sueños. Los demás decían que eran las ilusiones de un perdedor. A menudo se reían de él. "Adrián, Adrián, despierta, no digas más tonterias, pon los pies en el suelo de una vez."
De una vez.
Pero Adrián siempre estaba en potencia. Sólo necesitaba saber que todo era posible si descubría lo extraordinario en las cosas que estaban al alcance de sus manos.
Y eran tantas. Verdaderamente lo son.
Y así ocurrió, brilló todo y Adrián sostuvo lo frágil. Y pasó aquel día,
aquel día que el plomo convirtió el adorado vidrio en cristal.




nota: Sobre los comentarios, no he tenido ningún tipo de problema ni mal rollo etc.., al contrario, es simplemente un cambio. Se pueden hacer por e-mail. Me gustará. Salud.

martes, noviembre 23, 2004

pseudocódigo

Durante aquel par de años estudiando programación se arreglaba todo con funciones y procedimientos.
Qué fácil era declarar variables cuando hacía falta y convertir lo que fuera en integers o en chars!
O guardarlo todo en una base de datos y hacer un select en una tabla.

En cambio ahora

Ahora es una carga constante no encontrar el procedimiento, ni la función ni tener una variable global que guarde el resultado, un comodín. No hay contadores ni forma de declararte, ni algoritmos de búsqueda para encontrarse.

SI todo = verdadero
ENTONCES
Yo = 1;
SI todo = falso
ENTONCES
Yo = 0;

EscribirEnPantalla(Yo);

Cabe decir que aunque lo aprobé todo, la lógica no es mi fuerte, porque quien se pasa de historia del arte a informática, muy muy lógica...tampoco es. Para que nos vamos a engañar.

lunes, noviembre 22, 2004

no me escuchas cuando te hablo

Un día como el de hoy
me dibujabas en una servilleta de papel tu habitación.

Y a la vez empezaba a llover.

Con todo y tu esfuerzo por describirme tu espacio
- y sí te estaba escuchando-
yo siempre te imagino en la habitación de aquella pensión.

Qué le vamos a hacer.

La luz del pasillo entraba por debajo de la puerta y te iluminaba el cuerpo indefinidamente.

Vamos descobrir o mundo juntos baby
Quero aprender com teu pequeno e grande coração
Meu amor, meu amor.

sábado, noviembre 20, 2004

Paula, llena y completa



11:00 am por memoriaEl sábado por la mañana, Paula tuvo el cielo de su parte.
El viento soplaba las nubes y el sol decía que sí, que sí, que sí a todo. Eran las 9 y en el pasillo del
hospital se oían las bandejas del desayuno y a las enfermeras repartiendo te con madalenas y termómetros.
Era un día para amar, a quien fuera, pero para amar!
El abrigo de Ingrid estaba en la silla. Estiró un poco el brazo y lo alcanzó, se tapó con él, le rozaba la cara, y su perfume estaba allí.
Ingrid huele a cama recién hecha, a café y bocadillos a la plancha, a la música de fondo y al ruido de cafetería. Los camareros, de camisa blanca y pantalones negros, se pasean por los sueños de Paula con olivas y tapas variadas.
Todo eso es Ingrid en la incertidumbre y en los anhelos incumplidos. Pero ¿Acaso deben cumplirse?

( )

____________________________
De nuevo Paula en hospitales. Será porque en mi casa estamos acostumbrados a ese escenario, pero no es ninguna tragedia, es mala suerte, digo yo. Lo que más me intriga de los hospitales, y no es la primera vez que lo comento, es en que se basan para escoger los cuadros de los pasillos. ¿Por qué siempre son impresionistas? si Monet levantara la cabeza.

viernes, noviembre 19, 2004

de vuelta

Eva habla en el bar

He vuelto a la facultad después de 10 días. Diez días puede ser el tiempo que pasas de vacaciones o el tiempo que tarda en curarse un resfriado,
o diez días pueden ser, sencillamente, casi dos semanas.

Nos hemos dado un abrazo como si hubieran pasado seis meses, un año, ... nos hemos besuqueado. La profesora de la siguiente hora no ha venido y no sabe la ilusión que nos ha hecho. Así que nos hemos ido al bar y Eva me ha contado su vida, rápidamente, con un bocadillo de jamón y yo unas galletas de chocolate. Le he estado haciendo fotos mientras hablaba y hemos quedado para salir un día de estos.

Mar se ha acercado por detrás y ha deslizado un dedo por mi espalda.
Reconozco que me ha gustado. Mientras lo hacía me ha preguntado "¿Quieres?" mirándome y ofreciéndome otra galleta, y yo le he dicho que sí con la cabeza mientras se me escapaba una risilla. Y me ha contestado cantando: "ven a la escuela de calor..."

Me gusta esa canción.

jueves, noviembre 18, 2004

cobardía

Pasos de memoria

[+]


Qué inservible volver a andar los pasos.
Pasos sobre los pasos.
Qué reveladora la cobardía de Ingrid,
qué punzante lo que destruye.
-La ciudad se reclama a si misma-
Se le va de las manos.
Se lava las manos.

miércoles, noviembre 17, 2004

lo concreto

Estás sentada al borde de tu cama y de espaldas a mí enciendes una vela.

Estabas tan concentrada que tuve tiempo para pensar que un día escribiría que sentada al borde de tu cama y de espaldas a mí encendías una vela.

Te quemaste y yo me puse a reir. Y ya estaba todo tan oscuro... Después me quedé dormida.

Estos días pienso en ti y me alegra verte alegre por cosas en general y por nada en concreto. Lo concreto parece mucho más intenso pero creo que tiene límites.

lunes, noviembre 15, 2004

Rosebud

Hago las maletas y me voy de esta bitácora. En realidad, para mí esto es un lugar, ayer me dijeron que parecía un club social :) La verdad es que me gustó mucho eso de club social. Esto es una casa y a memoria le encanta describir casas, y hablar sobre casas e imaginarse casas, así que me voy a otra, quizás buscando la esencia con la que empecé Qué Mala Soy Dosificándote. Me da muchísima pena cerrar, y dejar de veros, tampoco quiero pensar en si es definitivo o temporal. Lo único que sé es que de momento no puedo seguir escribiendo aquí, memoria me trae recuerdos, qué oportuna. Quizás, dentro de x días vuelva a sentirme bien con Paola Vaggio pero eso no puedo saberlo hoy. Si me arrepiento, siempre puedo volver, a fín de cuentas está en mis manos.

Para reclamaciones varias o lo que querais, aclaraciones o dudas, saludos, aquí está mi e-mail, será un gustazo leeros.

paolavaggio@gmail.com

Debería cerrar con el primer post que escribí porque así sería cíclico y redondo. Pero recuperaré otro, algo así como el trineo de Ciudadano Kane, algo así como "Rosebud".


La primera vez que te dije Ahora (13 de Mayo 2004)


Te estoy mirando.

Te miro

mientras tus dedos me acarician los labios. Me dices "espera" e inclinas la cabeza hacia la ventana.
Ahora parece que no estás aquí, pero sigues enfrente y yo me siento espera en tu boca. Estoy dentro como una sílaba pegada al paladar, después suspendida en la punta de tu lengua, y estás a punto, casi a punto a punto de pronunciarme.
Tu otra mano está inmóvil, callada, recostada boca abajo... y en el hueco, no sé que puede haber,
no sé si hay cuentos o verbos que nos fijen un tiempo donde estén todos y podamos decir me-tocabas-me-tocas-me-tocarás, todo seguido y que signifique algo.
Algo de lo que podamos hablar tranquilamente mientras deja de llover o se hace de noche, cuando me vuelco sobre la palma de tu mano y te digo: "ahora".





domingo, noviembre 14, 2004

procesos

desorden





Ciao, ciao, bambina, un bacio ancora, e poi per sempre ti perderò. Come una fiaba, l'amore passa: C'era una volta poi non c'è più. Ciao, ciao, bambina, un beso todavía. Y luego para siempre te perderé . Como un cuento el amor pasa, Hubo una vez, luego no más.

Como cada domingo a las 23:00 escucharé Fabuloseando . Además creo que hoy ponen una canción de las mías. Ictioscopio, espero no arruinarte el programa. Ahora también repetición de Fabuloseando los martes a las 22:00.

una carta encima del pijama

Al llegar a casa, a estas horas en las que ya sale el sol, me he encontrado con una carta de mi madre encima del pijama.
No es que no la vea a menudo, de hecho vivimos en la misma casa, precisamente por eso me ha sorprendido.

"Mañana domingo vamos a ir a la feria del coche. Ya tengo la comida medio preparada, cuando volvamos, ya te despertaremos.
Sueña con lo que tú quieras, con lo que a ti te haga feliz. Los sueños y el pensamiento es lo único que nos pertenece sólo e individualmente a cada persona. Con ellos podemos ser, hacer, llegar, vivir y sentir el infinito. Yo, tu madre, esa mujer que quizás tú ves muy anticuada, un poco obsoleta con pensamientos de otros tiempos y un poco refunfuñona y un mucho pesada, he soñado mucho y sigo haciéndolo y te entiendo como no puedes imaginar, y te quiero a morir y me importa todo lo que te pasa y todo lo que sientes y el dolor que sufres lo sufro. La vida está llena de sensaciones que aún no has vivido y con los años, cuando incluso yo ya no esté a tu lado, recordarás estas cosas y ya no serán amargas, tampoco dulces, no quiero engañarte, pero serán insípidas, ¿y sabes una cosa? el futuro siempre se guarda cartas en la manga, y cuando crees que has perdido, Sorpresa! resulta que sales ganando. Mientras llega ese futuro, vive el presente con ánimo positivo, valorando lo que tienes y lo que recibes, si reflexionas, verás que es más de lo que parece y seguro que menos de lo que te mereces, pero todo llegará.


Te quiero.

Tu madre.

P.d.:No se lo cuentes a nadie ... pero muchos de mis sueños, se cumplieron. "


Está escrita en tres hojitas de las que usamos en casa para dejar recados en la nevera.

jueves, noviembre 11, 2004

volviendo a las andadas

gracias y gracias por la foto netalga


Esta mañana, Violetah asomaba la cabeza por el portal que yo había pasado de largo pensando en la hora: son las diez ya, son las diez.
Hemos entrado por una puerta oscura, después de unos breves escalones. La casa era grande, de piel fría y paredes deshabitadas y techos altos y altos, tan altos como para no encontrarlos.
El suelo...el suelo era firme, pero el vendedor con pinta de hombre corriente, ha comentado algo y no sé exactamente lo que habrá dicho, pero la frase que he escrito en mi mente ha sido "cuidado porque por ahí hay un agujero" y rápidamente he mirado hacia abajo, he visto el vacío,
me he visto cayendo,
me he visto en el fondo
y antes de que todo pudiera suceder, todo lo malo, he dado un giro de bailarina y he esquivado el supuesto agujero de mi cabeza.

En una de las habitaciones había una repisa para poner santos o vírgenes, y una ventana por la que se escapan las oraciones . También sé que por esa calle, años atrás, pasaban los tranvías.

Todas las puertas estaban abiertas y seguíamos la luz de la linterna que se paseaba por todos los rincones de aquella vida antigua. Hasta que hemos llegado a la cocina. Una cocina sin fuego, que apenas tenía mármol, pero grande, todo era grande. Y el vendedor ha dicho como sin darle importancia "la cocina necesita una reforma eh...", y sólo se me ha ocurrido imaginar un pote lleno de galletas y algún vaso de leche fría a medio beber.

Por encima de nuestras cabezas se extendía el altillo y unas escaleritas de color blanco llevaban hacia arriba. A saber cuántos secretos caben en un altillo. Intrigante.
Después hemos llegado al comedor, que era inmeeeenso, con mucha luz, y que tenía tres radiadores viejos y dos nuevos. Y por fín,
el *jardín.
Con los árboles sin podar y muchas plantas descuidadas.


Y al fondo... la Casa del Jardín, la sorpresa final.

Aunque a este otoño se le esfumen las ilusiones.


*Siempre debería sanearse la tierra de un viejo jardín porque puede guardar deseos enterrados. Y los sueños ajenos no son de fiar.

miércoles, noviembre 10, 2004

De las Memorias del Doctor Reixa



No sé cuanto hace que no veo a Ingrid, quizás haga un mes o sólo un par de días. Podría mirar en el historial desde que semana está vacía la habitación 111, pero no, da igual. El orden del tiempo ya no me parece el más exacto y menos para la inexacta Ingrid.

Tengo una sensación extraña, ¿acumulo un tiempo que aún no ha pasado? Quien sabe si mañana jugaré en el recreo a canicas con Víctor o escribiré en la pizarra el nombre de marina. Marina jugará con la silla de ruedas de Eva a carreras espaciales y Eva morirá al cabo de un año de una enfermedad común. Mi hermano y yo no iremos al entierro porque nuestra madre nos dirá que no es un lugar para los niños.

Pero todo esto sí ha sucedido y efectivamente no fuimos al entierro, tampoco se sabía muy bien que era un entierro porque hasta entonces sólo enterrábamos la sardina depués de los carnavales.

A Paula, la paciente de la 111, la dimos de alta cuando ella creyó que la supuesta herida de bala estaba curada. Unos días antes de marcharse me contó la historia acerca del latido que se escapó de un corazón ante la mirada atónita de un camarero que se quedó blanco como la nieve -respirar - como la nieve, blanco, cuando oyó aquel latido tan cerca. Tan afuera.



lunes, noviembre 08, 2004

la ciudad

no es sólo mi ciudad,
no es sólo tu ciudad,
son calles para andar contigo.
La vamos siguiendo a pasos, pasos muy juntos...
ahh y por eso parece distinta porque por primera vez es nuestra.

Al otro lado,
casi a las afueras,
hay un puente que cruza hasta tus labios
y una carretera que bordea mi piel.
Cerca del mar,
el vértigo de un rascacielos al mirarnos.

viernes, noviembre 05, 2004

De como la cama del Pintor pasó a ser propiedad de la Escritora

(En escena, el Pintor de Acuarelas y la Escritora Aficionada)

Un café y un mediodía en Montmartre, con las buhardillas iluminadas desde fuera y no desde dentro ya que es verano y la luz entra por las ventanas. El Pintor de Acuarelas decide abandonar su cama.

- Me voy a comprag otra cama.

Y la Escritora Aficionada preguntó,

- ¿Y pog qué?

Y el Pintor de Acuarelas contestó,

- Pogque estoy hagto de esa cama.

La Escritora Aficionada quiso detalles sobre el mueble. En fín, un mueble no porque las camas están muy vivas, sólo hace falta ver lo que se mueven, pero necesitaba más información, medidas, estructura, diseño...

- ¿ Y cómo es esa cama?

El Pintor de Acuarelas hizo un mmm y con la mirada perdida relató:

- El somier es de 135 por 190 centímetros con colchón de muelles normablock y la cabecera de barrotes metálicos.

La Escritora Aficionada puso cara de no está mal y dijo:

- ¿Bagotes de metal?

Y empezó a fantasear con la cama de barrotes de metal...

- Ah! seguía pegfecta, me va que ni pintada, nunca mejoj dicho. Puedo atag a todos mis innumegables amantes (---PAUSE! ya de por si los escritores son exagerados pero los aficionados aún más ---PLAY!) con pañuelos de seda a los bagotes de la cama, seguía magavilloso, fantastique! ¿cuánto pides pintoj?

El Pintor de Acuarelas volvió a encontrar su mirada y de vuelta a la realidad de las camas dijo:

- Nada mi queguida amiga, pog seg tu, nada.

Y así es como la cama del Pintor de Acuarelas pasó a ser propiedad de la Escritora Aficionada, y no fueron tantas, aunque tampoco fueron pocas, las manos que se dejaron atar a los barrotes de aquella antigua cama para satisfacer las fantasías de la Escritora Aficionada. Mientras, el pintor de acuarelas se compró otra cama de 200 por 200 cm. estilo japonés, una cama tataminosequé que no levantaba un palmo del suelo y a la que, por aquello de la nostalgia, pintó con acuarelas unos barrotes de metal en la cabecera.

El Pintor de Acuarelas y la Escritora Aficionada se despiden.
- Buen fín de semana pintog...
- Que lo pases bien escritoga...


lunes, noviembre 01, 2004

descubrimientos



Ella me descubrió y desde entonces, soy un descubrimiento. Antes no lo era, ahora sí. Cuando sus manos se hundieron en la arena, noté en mi mejilla el tacto suave de sus dedos. Yo quise brillar como un tesoro que empieza a serlo. Si soy de oro, quiero brillar con toda la luz del mediodía. Si soy de plata, quiero ser un destello de medianoche. ¿Y qué pasará si cesa su faceta exploradora? Si ha cesado. Acabaré contando los chistes malos que me invento? qué horror!

- ¿de donde son las gomas Milán?
- De Milán
- No! son de Borrar.

Lo que es seguro, es que Borrar es un lugar para rectificar.